Antes de informarnos de una molestia, le pedimos que hable con la persona que la causa. A menudo resulta que la persona que causa las molestias no lo hace a propósito y una buena discusión puede ofrecer una solución. Es importante mantener esta conversación en un momento tranquilo.

También puede preguntar al agresor si está sufriendo molestias por su parte. Así demuestras que tú también piensas en ellos. También puedes llegar a acuerdos durante la conversación sobre cómo evitar que se repita una situación así.

Si las conversaciones no dan resultado, también puedes recurrir a la mediación vecinal a través de tu ayuntamiento o pedir ayuda a supervisores como un conserje o un policía de barrio.

Si el delincuente comete un delito o perturba el orden público, le aconsejamos que se ponga en contacto con la policía (0900-8844).

Si no lo consigue, puede ponerse en contacto con nosotros. Le rogamos que rellene el formulario de molestias.

Tenga en cuenta que cuando el causante de las molestias no es inquilino de un inmueble de nuestra propiedad, nos resulta más difícil ponernos en contacto con él.

Por supuesto, haremos todo lo posible para que las molestias se reduzcan o incluso desaparezcan. Sin embargo, tenga en cuenta que ni siquiera nosotros podemos hacer siempre nada. Como propietario, no podemos simplemente rescindir el alquiler y desahuciar a un inquilino por cualquier motivo.

Debe ser capaz de demostrar una molestia y la presentación es muy importante en este caso. Por lo tanto, lleve un cuaderno de bitácora en el que anote cuándo experimenta una molestia y de qué tipo es. Puede adjuntar este diario al formulario de molestias.
Formulario de molestias